En Cartagena de Indias la mezcla cultural de blancos, mestizos y afroamericanos hizo que se aglutinaran los sabores y olores de otras latitudes y hoy día, propios y extraños pueden gozar de una experiencia inolvidable para el paladar.
Ejemplo de ello, es la mezcla de ingredientes como la yuca indígena, el cazabe o pan de las indias, los deleitantes envueltos en hoja de maíz y el plátano maduro, con aportes europeos como la carne de res, el trigo y la cebada, junto con elementos africanos como el ñame, fríjol guandul y el fríjol blanco de cabecita negra. Esa combinación de sabores evolucionó hasta conformar los exquisitos y variados platos que se pueden degustar en Cartagena. Es inevitable dejar de probar las arepas de huevo, ‘buñuelitos’ de fríjol, carimañolas o dulces tan típicos como los caballitos de papaya y las cocadas hechas a base de coco rallado.
Por supuesto, el colorido de refrescantes frutas como el mango, la patilla, el melón y la papaya es la mezcla típica perfecta para degustar en un día soleado. Tanto en las playas como en el centro histórico los turistas encontrarán palenqueras -hermosas morenas con trajes de colores-, que servirán estos manjares típicos del Caribe.
La ciudad posee más de 300 establecimientos dedicados a la gastronomía. Dentro de ese número se cuentan restaurantes de comida oriental, italiana, española, mediterránea, colombiana, argentina, fusión, caribeña, entre otras. Solamente el centro de la ciudad existen más de 70 restaurantes en los que se podrá disfrutar de los mejores platos. Sin embargo en Bocagrande, Manga, Crespo, El Cabrero, La Boquilla, Mamonal, y en las playas también hay restaurantes para todos los gustos y presupuestos.
El arroz puede ser arroz blanco de coco o arroz de coco negrito y la preparación puede incluir canela y uvas pasas. Se acompaña con pescado, patacones y ensalada.
Se compone por punta de anca de res y va acompañada con una salsa de color negro hecha con cebolla, tomate, ajo, naranja agria y pimienta.
Está hecha de maíz amarillo y rellena con huevo y/o carne picada. Se considera como parte importante del desayuno caribeño.
Las carimañolas son exquisitos pasteles fritos hechos de yuca molida, algunos rellenos de queso costeño o carne picada.
Son plátanos maduros cocinados con panela, canela, clavos de olor y esencia de kola. Se pueden servir solos o acompañados de queso rallado.
Las cocadas son dulces hechos a base de coco rallado y pueden ser blancas o color caramelo. Hay infinitas versiones de este dulce típico, que combinan el coco con frutas como la papaya, arequipe, piña, entre otras.
Los caballitos son un rico dulce de papaya combinados con azúcar, clavos y canela.
Fruto de una palma con púas, que crece espontáneamente en el magdalena. De su cocción sale este líquido de color púrpura refrescante tan apetecido en el calor cartagenero.
Tentempiés caribeños a base de maíz y envueltos en hojas de mazorca; existen diversos tipos entre los que se encuentran: el bollo limpio, bollo de coco, bollo de mazorca, bollo de yuca, entre otros.